sábado, 9 de julio de 2016

Tras otro interesantísimo capítulo en mi formación ELE, me quedo con la gran verdad que afirman:
"De nada sirve la experiencia si no disponemos de momentos para la reflexión".
 
 Reflexión abarca muchos campos tan importantes unos como otros; reflexionar sobre el proceso de la enseñanza que se sigue y el nivel de aprendizaje de nuestros alumnos es importante y necesario de cara a las calificaciones requeridas; pero, no por ello  ha de dejarse a un lado otra importante reflexión, aquella que nos ayude a la superación tanto profesional como personal, persiguiendo una ejemplaridad como docente y persona.
 
Nos han hecho en esta enriquecedora formación reflexionar por tanto, y en concreto me centro en otra frase insignia a tener presente acerca de la evaluación:
" la evaluación del aprendizaje y  para  el aprendizaje".
 
La reflexión me ha servido al menos para cuestionarme, importante como primer paso, y con ello dejar de automatizar comportamientos y rutinas docentes hacia las que te lleva el sistema que mira solo números y resultados finales del alumnado.
 
¿Cómo evalúo?. ¿Cuándo y cómo debería hacerlo?. ¿Soy objetivo?. ¿Miro mas los resultados o el proceso de aprendizaje y su esfuerzo?.
 
A continuación añado el ejercicio de este tema, una rúbrica que he elaborado para evaluar la siguiente actividad del aula:
 
Expresión escrita de una redacción que haría el alumno del nivel B2, donde se viera plasmado su conocimiento y habilidad de uso de todas las preposiciones interrogativas del Español (preferiblemente, en un texto tipo diálogo).
 
En los criterios de evaluación, se tiene en cuenta no sólo el conocimiento teórico como la aptitud del alumno (reflejado en el apartado aportación del alumno), que pesa un 35% sobre la nota final.
 
Partiendo de que la nota total es un 100%, se aplican los siguientes % a cada apartado:
 
30% Conocimiento sobre la adecuación teórica a la tarea
15% Propiedad léxica
15% Coherencia y Cohesión
15% Corrección formal
35% Aportación del alumno.
 
La puntuación de cada apartado va del 1 al 5, teniendo estas puntuaciones en cuenta y los porcentajes anteriormente expuestos,  hemos de ir calculando en cada apartado:
 
puntuación por % correspondiente.
 
Sumar todo lo obtenido y dividirlo entre 100 nos dará la calificación final
 
Se considera aprobado un 3, notable el 4 y sobresaliente el 5.